En los Juzgados de la Seguridad Social de todo el país ya hay más de 400.000 juicios de jubilados contra la ANSeS. Y las demandas siguen creciendo porque la Corte Suprema, en varios casos
testigo, ya se pronunció a favor de los reclamos de los jubilados.
Si bien siempre hubo demandas de jubilados, el respaldo de la doctrina de la Corte actuó como un disparador para que miles de jubilados se presentaran en la Justicia con la seguridad que
obtendrán un pronunciamiento favorable. Por ejemplo, mientras entre 2003 y 2005, en los Tribunales porteños se presentaban menos de 30.000 reclamos por año, entre 2006 y 2008,
subieron a 60.000 anuales y el año pasado superaron las 100.000 demandas , cifra que se repetiría a lo largo de 2010. Si se suman las demandas del interior, este año habría
120.000 nuevos juicios.
Así, a fines de marzo, el total de demandas en todo el país eran 362.000 , como informó Clarín dos meses atrás. Pero esa cifra siguió en alza.
“El total de reclamantes supera los 400.000 ”, dijo ayer el Juez de la Sala 2 de la Cámara de la Seguridad Social Luís René Herrero, con datos de julio.
La mayoría de las demandas es por reajuste de haberes y ejecución de sentencias . El reclamo “más popular” es similar al del caso Badaro en el que la
Corte Suprema ordenó que, por el período que va de enero de 2002 a diciembre de 2006, las jubilaciones debieron ser ajustadas un 88,3 por ciento . En ese lapso la ANSeS
dio solo dos aumentos generales: 10 y 22,1%, según si el jubilado ganara más o menos de $ 1.000. Así, la diferencia implica una mejora en la jubilación del 54,2 o 69,9%, según los casos.
La Corte Suprema también impugnó, en el caso Elliff, el cálculo del haber inicial porque la ANSeS toma en cuenta el sueldo promedio de los últimos 10 años pero no los
actualiza por la variación de los salarios, como fija la Corte, sino por los aumentos de las jubilaciones, notoriamente más bajos.
Por esta razón, muchos reclamos combinan Elliff con Badaro: piden que se les recalcule el haber inicial y ese haber más alto se ajuste por el 54,2 o 69,9%, según el caso. La diferencia
puede implicar un incremento de la jubilación de más del 100 por ciento.
También hay muchos reclamos de docentes porque no se les aplicó el 82% móvil, como fija la ley y como ratificó también la Corte en el caso Gemelli.
El problema se agrava porque en muchos casos la ANSeS no liquida correctamente la sentencia y eso obliga al jubilado a iniciar un nuevo juicio .
Lo que está en juego no es solo el reajuste de la jubilación a partir de la sentencia sino la retroactividad, más los intereses. Se estima que en promedio, cada juicio favorable implica,
en promedio a valores actuales, unos $ 70.000 por jubilado . Por eso los especialistas calculan que el pasivo que carga la ANSeS por los juicios hoy ronda los 28.000 millones de pesos.
En el Presupuesto de este año se prevé destinar $ 2.800 millones al pago de juicios, lo que equivaldría a saldar entr e 20.000 y 25.000 sentencias.
El abogado Horacio González le dijo a Clarín que, junto al CELS y otros organismos, el Gobierno volvió a ser denunciado semanas atrás ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos
(CIDH) de la OEA porque no está cumpliendo con el acuerdo alcanzado el año pasado.
Allí el Gobierno se había comprometido a pagar todas las sentencias judiciales firmes y a no apelar las sentencias judiciales de primera o segunda instancia favorables a los jubilados, en
los que la Corte Suprema ya se hubiera expedido.
De todas maneras, el Juez Herrero insiste en que la Corte Suprema debería extender su doctrina a todos los jubilados, sin necesidad que cada uno tenga que iniciar un juicio.